El espacio de análisis permite pensar cuestiones muy singulares de cada persona como ser sus elecciones, obstáculos, duelos, sueños. Se trabajan también problemáticas actuales tales como ansiedad, inhibición, estrés, depresión y ataques de pánico.

La propuesta es generar ese espacio donde la persona pueda poner en palabras su malestar, donde pueda ser escuchado y juntos poder pensar, reinventar y  superar aquellos obstáculos que le impiden poder hacerse un lugar donde realmente quiere estar.

Es un hermoso camino, por momentos arduo, por momentos  ligero, donde la posibilidad de reflexionar y pensarse libremente puedan dar lugar a elecciones genuinas, a lugares insospechados, a una vida diferente. Es una apuesta a la palabra, a un sujeto que sufre y quiere otra cosa, en definitiva una apuesta al deseo.